El ex diputado provincial Germán Kiczka (44) recibió una pena de 14 años de prisión por tener, facilitar y distribuir material de explotación sexual infantil agravado por ser las victimas menores de 13 años. En tanto, su hermano Sebastián (47) recibió 12 años de condena por tener y facilitar material, al tiempo que se lo encontró culpable del delito de abuso sexual sin acceso carnal.
El fallo se conoció después de más de tres horas de deliberación de los jueces Gustavo Bernie, Viviana Cukla y César Antonio Yaya. Cukla se pronunció por penas menos elevadas: ocho años para el ex legislador opositor y seis para su hermano. Además, los magistrados decidieron remitir las declaraciones del diputado Pedro Puerta y del padre de los ahora condenados, para que sean investigados por el delito de falso testimonio.
En el punto 1 de la parte resolutiva de la sentencia -los fundamentos se darán a conocer recién el 5 de mayo- los magistrados estuvieron de acuerdo en rechazar por inadmisible un pedido de nulidad absoluto que había planteado el abogado de Germán Kiczka. De haberlo aceptado, el juicio se hubiera caído.
Las diferencias de criterios en el Tribunal afloraron cuando los jueces tuvieron que resolver otro planteo de nulidad, esta vez de la defensa de Sebastián. Los abogados sostuvieron que ni la víctima ni la investigación pudo determinar la fecha en que el mayor de los hermanos cometió el abuso de una adolescente. Bernie y Yaya rechazaron el pedido, mientras que Cukla lo avaló.
En su fallo, el Tribunal también decidió que los hermanos sean trasladados inmediatamente a la Unidad Penal 1, en la localidad de Loreto, para comenzar a cumplir la condena. Hasta el inicio del juicio habían estado cumpliendo la prisión preventiva en un complejo penitenciario que está más cerca de la ciudad de Apóstoles.
Por la mañana, en un alegato de más de cuatro horas, los fiscales Martín Rau y Vladimir Glinka habían pedido una pena de 15 años para Germán y 12 años para Sebastián. Además, que se mantengan sus prisiones preventivas.
Los hermanos estaban acusados de «tenencia, facilitación y distribución de material de abuso sexual infantil (MASI)», pero el mayor de ellos también estaba procesado por el delito de abuso sexual simple de una adolescente, hecho que ocurrió en el baño de un gimnasio de la ciudad de Apóstoles.
En dos computadores, dos pendrive y un CD los peritos hallaron más de un millar de videos y fotos, incluidos casos de zoofilia.
En la última jornada, los jueces Gustavo Bernie, Viviana Cukla y César Yaya escucharon con atención el testimonio de la psicóloga que trazó un perfil poco favorable para los imputados. Los fiscales dijeron que, pese a los embates de los abogados defensores, la profesional ratificó todos los informes que en su momento elevó al Juzgado de Instrucción de Apóstoles.
Luego llegó el turno de los alegatos de las defensas. Eduardo Paredes y María Laura Alvarenga, abogados de Sebastián, criticaron la pericia psicológica oficial y pidieron que su defendido sea internado en una unidad de salud mental del servicio penitenciario provincial mientras dure su pena para hacer un tratamiento que le permita superar su cuadro de adicciones.
El abogado del ex diputado Germán Kiczka, Gonzalo De Paula, por su parte, había pedido la nulidad absoluta porque no hay un relato preciso, claro y circunstanciado de los hechos sobre cuando supuestamente su defendido cometió los hechos que se le imputan. Y de forma subsidiaria la absolución total de Germán.
Este miércoles la jornada comenzó con los extensos alegatos de los fiscales, que pidieron difundir en la audiencia y sólo para los jueces algunos de los videos y fotos que consumían los acusados.
«Yo recuerdo que, cuando era chico, me asustaban con el cuco. ¿Y saben qué señores jueces? El cuco está en la red. Y el cuco son personas que hacen este tipo de cuestiones», cerró el fiscal Rau.
La defensa de Sebastián, integrada por Paredes y Alvarenga, apuntó desde el inicio del juicio oral pero no público a presentar al mayor de los hermanos como un adicto al consumo de videos de pedofilia y sustancias. Paredes se pronunció a favor de un tratamiento compulsivo en lugar de una pena de prisión.
Tal como había adelantado Clarín, el defensor de Germán Kiczka cargó en su alegato contra la idoneidad de los miembros de la Secretaría de Apoyo en Investigaciones Complejas (SAIC) que peritaron los dispositivos electrónicos secuestrados el año pasado en sendos allanamientos, y también sobre la cadena de custodia de los mismos.
En las diferentes declaraciones que realizó ante el Tribunal, el mayor de los hermanos, un graduado en bellas artes, buscó cargar sobre sus espaldas con toda la responsabilidad. Incluso llegó a pedirle disculpas a Germán delante de los magistrados.
En un primer momento, se hizo cargo del material hallado en una computadora que en febrero del año pasado se secuestró en la casa que comparte con sus padres, en el barrio Illia de Apóstoles. Y este martes, en una nueva exposición, dijo que una noche, mientras bebía cerveza y consumía drogas, bajó videos. Y que por el estado en que se encontraba, olvidó eliminar.
“Yo no puedo evitar ver esto donde tengo una oportunidad (en referencia a los videos de pedofilia). Miro, tomo cerveza, soy una persona ansiosa. Y bueno, en lo de mi hermano empecé a mirar eso en la computadora, tomar cerveza. Se estiró la noche, me olvidé de la computadora. Yo (estaba) convencido que borré todo eso para no dejar rastro… me olvidé del pendrive. Mucho más no me acuerdo, pero quería aclarar eso”, indicó.
Este martes, Sebastián volvió a declarar. Ratificó que usó la notebook de su hermano para “mirar ese material que, aclaro, es muy, muy fácil de conseguir. Lo he visto usando el programa eMule, que también está ahí al alcance, sino también en Twitter o Instagram… es sencillo el acceso a eso”, insistió.
Agregó que además de mirar los videos usó la notebook de Germán para hacer videos “con temática específica, especial, futurista, considerado ciber punk”, como parte de sus trabajos artísticos.
El lunes, el ex diputado amplió su declaración pero sin aceptar preguntas. En referencia a un pendrive con material de abuso sexual de menores hallado en su casa, sostuvo que lo había dejado su hermano.
También apuntó a Sebastián por el hallazgo de MASI en una notebook Lenovo secuestrada en su casa. Reveló que en una charla con su hermano “él me asegura que después de haberla utilizado, borró todos los archivos. Y yo nunca me crucé con esos archivos mientras utilizaba la computadora… eso quiero que quede perfectamente registrado. Él dice que lo borró y yo jamás me los crucé en la computadora”, insistió.
«El show de magia del tío Germán»
En otro tramo de su exposición, se refirió a un programa denominado “El show de magia del tío Germán”, que los especialistas señalaron que tenía como finalidad captar a menores para ser abusados.
El ex diputado aseguró que esa idea surgió durante la pandemia de coronavirus para entretener a sus sobrinos que estaban aislados en Buenos Aires. Y que fue su cuñado, especialista en informática, quien le sugirió levantarlo a Youtube para que lo pudieran ver todos.
“Les invito a que lo miren porque los videos están buenísimos, son muy divertidos”, recomendó a los jueces.
Agregó que del programa, que él se encargaba de editar, participaron sus padres y su hermano. Se mostró dolido porque se le haya dado otro cariz a la iniciativa que sólo buscaba entretener en tiempos de encierro. Y como prueba de inocencia, sostuvo que esos videos todavía están en la plataforma. “Si hubiese habido algo fuera de lugar, YouTube hace rato ya lo había sacado”.
Misiones. Corresponsal
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