El dólar blue concluyó el viernes en $1.190, y acumuló el mes pasado una caída de $45. Y los analistas prevén que la calma de dólares paralelos continuará en noviembre, aunque observan que hay algunos factores que podrán generar volatilidad, como ocurre con la reciente medida del BCRA, que bajó la tasa monetaria.
Los expertos atribuyeron la baja de los dólares paralelos en octubre al flujo que ingresó por el blanqueo que fue más exitoso de lo esperado, a la estrategia de intervención oficial en el segmento de las divisas financieras, el desarme de posiciones dolarizadas para hacer carry trade, la buena liquidación del agro que a través del dólar blend provee de más oferta en el segmento de CCL.
Otro driver de la calma cambiaria fue la sorpresiva racha compradora del Banco Central que en octubre acumuló compras por u$s1.530 millones, el mayor saldo positivo para ese mes desde que inició la serie informativa de la entidad en 2003.
También contribuyeron los recientes anuncios de que el Tesoro le compró al BCRA u$s2.701 millones para hacer frente al pago en dólares y euros correspondientes a la amortización de capital de los bonos Globales y Bonares con vencimiento en enero de 2025, el financiamiento por u$s8.800 millones proveniente del BID y el Banco Mundial, y un probable REPO por u$s2.700 millones, todos factores que impulsaron que el riesgo país perforara en octubre la barrera de 1.000 puntos.
El impacto de la baja de la tasa monetaria
Ian Colombo, Financial Advisor de Cocos Capital, comentó que, en una reacción inicial, «esperábamos que la baja de tasas de interés afecte al precio de los dólares, impulsándolos levemente al alza». No obstante, el experto cree que «este movimiento de tasas no es algo que afecte a la tendencia de mediano largo plazo del dólar, y que se mantendrá por su sendero de convergencia al dólar oficial durante los proximos meses».
Asimismo, el analista financiero Gustavo Ber juzgó que la baja de tasas «no alterará la calma cambiaria en el actual contexto económico-financiero, en tal caso podría llegar a imponer un respiro a corto plazo en el descenso que venían experimentando los dólares financieros y libre».
Sin embargo, prevé que «en la medida que continúen las positivas señales sobre la desinflación, así como los avances en la estrategia de ordenamiento macro, resultaría apenas efímero, y se reanudaría próximamente el gradual descenso de los dólares».
Para la economista Natalia Motyl, «sin emisión monetaria no vamos a ver cambios en los dólares financieros, todo lo contrario, muy probablemente la brecha se empiece a reducir».
En este contexto, Damián Palais, Financial Advisor de Cocos Capitales, consideró que «es probable que la relativa calma que han mostrado los dólares paralelos pueda mantenerse, la dinámica podría sostenerse en una senda relativamente estable, aunque con factores de volatilidad potencial».
«A lo largo de los últimos meses, tanto el dólar blue como los dólares financieros han experimentado una baja impulsada por la absorción de pesos a través de políticas monetarias restrictivas y la estabilidad en la demanda de dólares, sumando al fuerte ingreso de fondos del blanqueo. Esta situación ha permitido contener la presión sobre las cotizaciones», señaló.
Por otra parte, Palais sostuvo que «si bien es posible que el dólar blue tenga cierto recorrido a la baja debido a la influencia del blanqueo, la cercanía de las vacaciones y la brecha con el dólar turista podrían elevar la demanda estacional, ejerciendo una presión adicional sobre la cotización». Y acotó que «este fenómeno es recurrente en estas épocas del año, ya que muchos turistas buscan alternativas de cambio menos reguladas».
A su vez, Pablo Repetto, jefe de research de Aurum Valores, planteó que «si se mantiene este ritmo de tasa de interés,no baja mucho más,y la tasa de devaluación continúa igual, sigue habiendo incentivo para que haya liquidación de divisas al oficial, eso hace que haya una oferta de dólar blend mucho más alta, y en ese contexto puede pasar que los dólares se mantengan relativamente calmos durante un mes más«.
También cree que «el BCRA va a seguir comprando y eso va ser un factor adicional que va a mantener relativamente equilibrada la oferta y demanda de CCL y MEP».
En sintonía, Fernando Baer, economista jefe de Quantum Finanzas, esgrimió que «con este sesgo fiscal y monetario, donde la tasa de interés en pesos es levemente positiva en términos reales y, mucho más medida en dólares oficiales (crawl del 2%), la estrategia de carry seguramente se mantendrá».
«En ese sentido, podríamos seguir viendo oferta neta de divisas, con dólares financieros estables o tendencia levemente hacia abajo. En términos de balance pesos/dólares hoy en la economía, la relación es de las más bajas de los últimos 22 años, con lo cual desaparecen algunos de los factores que podrían generar presión sobre los dólares financieros», justificó.
Por su parte, el operador Gustavo Quintana de Pr Cambios, juzgó que «la calma de los dólares paralelos no se debe exclusivamente al efecto del blanqueo, por lo tanto, creo que en los primeros días de noviembre todo se mantendrá como hasta ahora, con mínimas fluctuaciones». Y añadió: «No veo razones de peso como para generar una suba sostenida de las cotizaciones, salvo imponderables. Todos los motivos que dieron pie a este escenario se van a mantener en el corto plazo y por lo tanto no veo modificaciones significativas».
Según su visión, «la demanda por turismo al exterior se hará sentir sobre el final de noviembre, no con mucha intensidad en la primera quincena».
El analista financiero Christian Buteler opinó que esta última semana «probablemente hayamos visto ya el valor piso en el blue y los dólares financieros, y no creo que sigan cayendo». A su criterio, «puede repuntar un poco a la suba pero sin movimientos bruscos, sino un movimiento lógico hacia arriba».
Dólares paralelos: qué precios estima el mercado para noviembre
El economista Federico Glustein vaticinó que «como viene hoy el panorama, lo más probable es que continúe la calma extensiva de los paralelos, abajo de $1.200 que pasó a ser techo y cerca de los $1.100 que estipulaba el Gobierno».
«Hay una tendencia estable levemente bajista. En términos macroeconómicos se está cumpliendo con las metas, bajó el riesgo país, y en términos micro, se están recuperando el poder adquisitivo en algunos sectores, pero sin presión al alza, al menos hasta diciembre, que podría cambiar la tendencia por vacaciones y ahorro por aguinaldo», alegó.
Glustein también dijo que no espera que haya retiros grandes de los fondos blanqueados, «porque la tasa americana sigue 5% interanual, es una pérdida grande de capital que invertido podría generar mucho más».
En ese marco, proyectó que el MEP oscilará en noviembre «entre $1.100 y $1.140 mientras que el CCL rondará entre $1.120 y $1,160, y el blue entre $1.140 y $1.190».
El analista financiero Gustavo Ber estimó que los dólares paralelos en noviembre «seguirán gradualmente en descenso por señales de desinflación». Y pronosticó que las divisas financieras cotizarán en un rango de entre $ 1.100 y $ 1.150, en tanto que el blue estará en torno a $1.200 por vacaciones, pero en ambos casos con acotada volatilidad».
Maximiliano Ramírez, socio de Lambda Consultores, prevé que «mientras le sigan dando el carry trade, la calma va a seguir, y los dólares paralelos fluctuarán entre $1.100 y $1.200″.
«No especulo grandes cambios.blanqueo.Si sigues con esta brecha cambiaria de 16% a 20%, según tomes los dólares financieros o el blue, hay incentivos para que el exportador liquide e incentivos a que el importador antes de demandar dólares haga el juego del carry que viene haciendo», argumentó.
Para Repetto, los dólares financieros se moverán entre $1.150 y $1.250, en tanto que Buteler vislumbra entre $1.200 y $1.300.
Pablo Lazzati CEO de Insider Finance, resaltó que «continúa la calma en los dólares financieros, y vemos que se mantendrá la brecha entre el oficial y el MEP entre el 3% y 10% siempre y cuando el gobierno siga por la senda que viene recorriendo hasta hoy con su meta de devaluación mensual del 2%», por lo cual «posiblemente el dólar paralelo esté un poco más apreciado, cercano a los $1.200».
Dólares paralelos: la influencia de las elecciones en Estados Unidos
Para Buteler, «el aspecto más importante es la elección de Estados Unidos, si gana Donald Trump el mercado, en un primer momento, va a leer que eso podría traerle dólares a la Argentina, y así el valor del dólar podría mantenerse más tranquilo. Aunque no es que si gana Harris el dólar va a volar, sino que Trump traería más tranquilidad», evaluó.
En el plano local, Buteler no avizora factores de riesgo que pueda tensionar a los dólares paralelos salvo que haya algún evento en el ámbito político. Y sostuvo que también es clave que haya buenos «datos de inflación, recaudación, el resultado fiscal«.
Baer también aludió que el resultado las elecciones en EE.UU. «podrian agregar incertidumbre». De igual mirada, Glustein advirtió que «las elecciones norteamericanas podrían afectar a la economía local respecto a la tasa de interés y la salida e ingreso de capitales dependiendo del resultado y como lo tome el mercado global puede ser positivo o negativo».
En ese sentido, Lazzati planteó que «si bien una victoria de la candidata demócrata Kamala Harris no representaría un impacto ni positivo ni negativo en el futuro comercial y financiero de nuestro país, si vemos como factor propulsor una victoria del republicano Donald Trump». «Esto se debe principalmente a su muy buena relación con nuestro presidente y si hacemos revisión pasada, durante las presidencias argentinas que tuvieron buena relación con EE.UU. -Menem y Macri- el mercado local se vio fuertemente beneficiado», fundamentó.
Eric Ritondale, economista jefe de Puente, cree que «en noviembre continuará la calma cambiaria, con posibilidades de algo de ruido sobre las valuaciones soberanas por la mayor volatilidad a nivel internacional que puedan traer las elecciones de EE.UU.»
«No creemos que en el mes de noviembre sean las variables locales que agreguen volatilidad; se perfila como un mes donde las dinámicas globales pueden pesar más.»A priori ,las elecciones de Estados Unidos no se platean como un escenario totalmente binario, ya que las composiciones de las cámaras del Congreso quedarían repartidas en la mayoría de los escenarios mas probables, lo que garantiza ciertos contrapesos sobre los aspectos de la agenda de cada candidato que al mercado preocupan. Por lo pronto, en las próximas semanas el mercado de deuda emergente seguiría en modo ‘wait and see’, por lo que esperamos que se estabilice el rally que vimos en las ultimas semanas», analizó.
A su vez, Palais aseguró que «si bien la inflación ha mostrado desaceleración, la necesidad de sostener esta tendencia será clave para evitar presiones adicionales sobre el tipo de cambio». Y enfatizó que «la inflación continúa siendo un factor que podría impactar en las expectativas devaluatorias y, por ende, en la demanda de dólares», y recalcó que otra cuestión «a monitorear será la política de tasas del BCRA».
«Si la inflación logra consolidar una tendencia a la baja y hubiera un ajuste a la baja en las tasas, esto podría modificar los incentivos en la colocación de pesos, generando una demanda alternativa que impacte en el mercado de divisas. Sin embargo, en el contexto actual, el BCRA parece decidido a mantener tasas reales positiva», juzgó.
Además indicó que «la actividad del BCRA en el mercado de cambios también será un elemento fundamental. Octubre cerró muy comprador. Si la entidad logra mantener la tendencia, contribuyendo a sostener el nivel de reservas, la estabilidad cambiaria se mantendría».
Pero advirtió que «en caso de que se genere una mayor demanda de divisas o de que aumenten las necesidades de intervención en el mercado, el BCRA podría verse obligado a retornar al terreno vendedor, lo que podría generar algún nivel de presión sobre los dólares financieros».