Los animales son una excelente compañía para los seres humanos. En el caso especial de los perros, son una de las mascotas más escogidas por las personas que viven en un departamento. A la hora de adoptar -o comprar- uno, se deberá tener en cuenta varios factores como por ejemplo el tamaño del hogar en relación con la mascota, que vivirá entre cuatro paredes y, en el mejor de los casos, tendrá un balcón para ampliar su recorrido.
Además de su educación y hábitos, los animales necesitan un lugar acogedor para poder desarrollar su vida y es por eso que los especialistas decidieron elaborar un listado de diez razas de perros pequeños que resultan adecuadas para las personas que no tienen una vivienda espaciosa.
A la hora de elaborar el ranking, algunas razas aparecen en el top 10 como las reconocidas Chihuahuas, Yorkies, Maltés y Pug, entre otros animales que asiduamente se encuentren en mobiliarios de hasta tres ambientes.
1. Chihuahua
De dimensiones pequeñas, el Chihuahua se caracteriza por tener una energía desbordante, lo que obliga al dueño a estar atento a sus movimientos en los primeros años de vida. Dentro de sus virtudes, esta raza se considera inteligente por sobre el resto en cuanto a la asimilación de conceptos. A pesar de ser domesticable, este perro deberá tener una rutina que conste de caminatas y estimulación mental para su normal desarrollo.
De cara aplanada y color blanco con detalles marrones y negros, esta raza es considerada un “guardián del hogar” al estar atento a todos los movimientos que hay a su alrededor. Con un temperamento leal y sociable, este perro tiene un gran feeling con los más pequeños, quienes están en contacto directo y suelen tener un gran apego.
3. Bichon Frisé
Conocidos por tener la lengua afuera durante gran parte del día y un carácter alegre, que contagia al resto de los integrantes del departamento, esta raza es una de las más elegidas a la hora de adoptar. Cariñoso y movedizo, este animal de pequeñas dimensiones necesita descargar su energía con juegos, lo que posibilitará luego que pueda tener un descanso adecuado.
Sin ser relativamente pequeño como los anteriormente mencionados, esta raza es característica por sus patas cortas y orejas largas y caídas. Su temperamento dócil hace que los dueños queden encantados con su presencia. A su vez, los Beagle se adaptan a cualquier circunstancia, incluso si existiese otra mascota en el departamento.
5. Golden Retriever
Sin tener las dimensiones de un Golden, esta subraza se adapta a espacios reducidos. Originaria de Escocia, sus aptitudes marcan que es un animal de caza, por lo cual se deduce que tiene un perfil muy activo que provocará que sus dueños estén atentos a sus comportamientos. Con un peso que puede llegar a los 20 kilos, este ejemplar es voraz, inteligente y decidido.
Esta raza canina es perteneciente a la familia de los Spitz. Su rostro alegre y divertido es uno de los grandes motivos por el que las personas quieren tenerlo consigo. Su pequeño porte es ideal para departamentos donde el espacio no abunda.
7. Maltés
Pequeños, peludos y afectuosos definen a la perfección a esta mascota que es muy habitual en departamentos. Al ser hogareños, los dueños no deberán estar encima de ellos para realizar un paseo, una circunstancia fundamental para las personas con poco tiempo durante el día.
De color negro y hocico blanco, este ejemplar tiene una habilidad innata para la vigilancia, por eso es común verlo ladrar ante la llegada de una visita al departamento. Atento y gran receptor de cariño son dos aptitudes que lo depositan entre los diez perros más elegidos.
9. Yorkies
De contextura pequeña y un hocico repleto de pelo, esta raza también forma parte del ranking por su docilidad para adaptarse. Debido a su energía, que lo hace correr de un lado para el otro en el hogar, es necesario que los dueños estén atentos para sacarlo a pasear y así no generarle un estrés a largo plazo.
Es una de las mascotas de “moda”. En el último tiempo, las personas quieren adoptarlos por su carácter adorable. Al ser parecido en tamaño al Chihuahua, este animal necesita estar rodeado de personas u otros perros para poder relacionarse y así desarrollar su vida.
LA NACION