Referirse a la salud de una persona siempre es un asunto delicado y no es el espíritu de este texto ahondar en ella. Pero sí es un tema de interés público cómo el estado clínico de Miguel Ángel Russo impacta en la gestión de los asuntos futbolísticos del equipo y abre un escenario de incertidumbre sobre si el entrenador podrá seguir asumiendo un cargo que requiere tanta energía, en un club tan demandante en exigencia y exposición.
Sin ahondar en descripciones invasivas de su situación personal, resulta evidente a simple vista que Russo ha ido perdiendo protagonismo en el día a día del equipo. Hace rato ya que el entrenador descansa la gestión de las prácticas en sus ayudantes (Claudio Úbeda y Juvenal Rodríguez), pero de unas semanas a esta parte ese escenario se hizo evidente, también, en los partidos. A la hora de dar indicaciones, de activar los cambios o simplemente en el seguimiento del minuto a minuto del encuentro y sus circunstancias.
Ahora, a Russo es común verlo sentado en una silla separada del resto del banco de suplentes, como sucedió en Mendoza ante Independiente Rivadavia y también en el triunfo ante Aldosivi, en una actitud francamente pasiva, contemplativa y con escasa interacción.
Miguel ha perdido protagonismo también en el día a día. (Prensa Boca)
Un día después de que Hugo Gottardi, de las personas que más tiempo compartió con Russo en su etapa de jugador y director técnico, alertara sobre la situación de salud de Miguelo, el DT de Boca debió ser hospitalizado. Las circunstancias y la evolución, así como su situación general, es materia de médicos y especialistas.
Pero lo concreto es que la realidad sigue sumando luces de alerta que es imposible desatender para Boca institución. Otra vez: el estado de salud es privativa de la persona, las consecuencias en lo profesional es un asunto que el club deberá resolver con prontitud, aunque se comprende la actitud prudente de Riquelme y sus colaboradores para dejar que la situación decante.
Ojalá que Russo mejore y se recupere, Él y su familia, más que nadie, sabrán hasta cuándo vale la pena seguir tirando del piolín…
Mirá también
La salud de Russo: el primer panorama del día tras la internación que preocupó al Mundo Boca
Mirá también
Las imágenes de Venezuela entrenando en Boca Predio
Mirá también
Con un par de dudas, la probable formación de la Selección Argentina vs. Venezuela
Mirá también
Cavani y la resurrección de Boca: el arco en cero, el efecto Paredes y la receta que cambió todo
Mirá también
Palacios al descubierto: «Fueron momentos muy turbulentos, mis compañeros me…»
Mirá también