En febrero volvieron a caer las ventas de combustibles, que ya van por el décimo quinto mes consecutivo en retroceso. Durante el segundo mes del año, el consumo se retrajo 4,0 por ciento interanual y 7,9 por ciento respecto a enero. Este resultado está asociado básicamente al deterioro de la actividad productiva en general.
El volumen total de venta al público en el segundo mes del año fue de 1.309.505 metros cúbicos entre naftas y gasoil, lo que representa una variación negativa del 4,0 por ciento en relación a febrero de 2024.
En lo que va de la gestión de Javier Milei como presidente, los despachos globales de combustibles no pararon ni un solo mes de retroceder. Sin embargo, el segmento premium se mantuvo al alza, al igual que ocurre con el mercado de los autos de alta gama.
En el intermensual, las ventas se desplomaron 7,9 por ciento. Del total comercializado en febrero, las naftas representaron el 58 por ciento y el gasoil el 42 por ciento. Los datos se desprenden del informe elaborado por la consultora Politikon Chaco, en base a información de la Secretaría de Energía de la Nación.
Desde el sector de las estaciones de servicio anticiparon que abril también será un período marcado por un nuevo aumento de los precios, con la consiguiente presión inflacionaria. Estiman que la suba de las naftas oscilará en torno al 2 por ciento. De esa forma, el litro de súper pasará a cotizar muy cerca de los 1.200 pesos.
Por tipo
El desempeño interanual por tipo de combustible a nivel nacional estableció que la nafta se contrajo un 1,1 por ciento a raíz de la caída del segmento súper (-4,8 por ciento). El premium, en cambio, volvió a registrar subas (+11,3 por ciento) aunque en volúmenes menores a los que venía indicando.
En el caso del gasoil, clave para el sector de la producción, el descenso fue de 7,7 por ciento interanual. En el desagregado, el dato abarca 5,8 por ciento de alza en los despachos del premium y 14,7 por ciento de caída en el común.
Por regiones
El reporte de la consultora analiza además cómo se movieron las ventas en las distintas jurisdicciones subnacionales.
Los resultados interanuales son heterogéneos. Seis provincias mostraron incrementos en las ventas totales de combustible: Formosa lideró con una suba del 3,1 por ciento, seguida por Chubut con un 2,4 por ciento y, más lejos quedaron Neuquén, Tierra del Fuego, Chaco y San Juan, con alzas inferiores al 1 por ciento.
En contraposición, dieciocho distritos registraron bajas interanuales. Río Negro, la Ciudad de Buenos Aires y Tucumán presentaron los descensos más pronunciados, todos de doble dígito: en el total de ventas CABA cayó 12,8 por ciento; Río Negro del 13,0 por ciento y Tucumán del 15,1 por ciento.
En cuanto al tipo de combustible más vendido por jurisdicción, la nafta predominó en 22 de las 24 provincias. Con picos de concentración en territorio porteño, representó el 76 por ciento del total comercializado. La Pampa y Mendoza fueron las únicas provincias donde el gasoil superó a la nafta en el global de los despachos.
Respecto al desempeño interanual por tipo de combustible a nivel provincial, nueve provincias registraron aumentos en la venta de naftas. Mendoza encabezó la lista con un incremento del 4,3 por ciento, seguida por Neuquén (3,1 por ciento) y Chaco (3,0 por ciento).
Entre los quince distritos con bajas en la venta de nafta, Tucumán presentó la mayor caída, con un 12,5 por ciento.
Al analizar los segmentos de nafta, la súper solo mostró alzas en Chaco y Formosa (0,6 por ciento en ambos casos), mientras que la premium creció en 23 distritos, con Catamarca a la cabeza. CABA fue la única jurisdicción con una baja en la venta de nafta premium.