Ministra Patricia Bullrich.
“Estamos trabajando para que esto no se convierta en un casus belli, sino que sea realmente un final feliz”, dijo la ministra de Seguridad en alusión a un posible motivo de guerra o conflicto armado (casus belli) con la nación caribeña.
El cabo primero de Gendarmería, como se informó, fue detenido por las fuerzas de seguridad de Nicolás Maduro al atravesar un paso fronterizo entre Colombia y Venezuela, cuando se dirigía a visitar a su pareja y a su hijo de dos años.
“Lo han tomado de rehén del régimen y estamos trabajando con el canciller Gerardo Werthein para que cese este secuestro de este gendarme y pueda volver con su familia”, aseguró Bullrich, al tiempo que señaló que Gallo está detenido “en una base de inteligencia en Táchira”.
Se trata de una zona que, por ser limítrofe con territorio colombiano, país con el que el gobierno de Venezuela mantiene constantes conflictos diplomáticos, cuenta con numerosas bases militares, así como de la Guardia Nacional Bolivariana.
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«Sabemos donde está: está en una base de inteligencia en Táchira. La citaron a la madre de la novia pero ella, que es abogada, por un tema de seguridad no se acercó”, precisó la ministra en declaraciones radiales.
Sobre la imputación que pesa sobre el gendarme, de presunto “espionaje ilegal”, Bullrich afirmó que “es una interpretación totalmente estúpida, banal, poco seria”.
“Es una persona que tiene a su hijo y a su familia allá y fue a visitarla. De ahí poder inferir que era un espía de la Argentina que manda un gendarme por un paso legal, con sus credenciales… Seríamos muy malos como inteligencia si hiciéramos eso«, subrayó.
Dijo también que Cancillería busca la ayuda de Francia para la liberación del gendarme al negar que estén colaborando Brasil y Colombia. “Vamos a luchar por todos los medios porque este secuestro es absolutamente ilegal, muestra que no hay derechos humanos ni libertad de las personas y vamos a defender a nuestro gendarme con todas nuestras fuerzas”, aseveró Bullrich.
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Gendarme Nahuel Agustín Gallo.
Finalmente, dijo que el Ministerio de Seguridad pondrá en práctica una norma para que los miembros de las fuerzas de seguridad federales tengan prohibido ir a determinados países: «Van a tener que pedir permiso, porque no nos puede pasar esto que nos secuestren un soldado gendarme”, completó.
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