Salir en un auto, para la familia marplatense Franco-Dusek, se ha transformado en una pesadilla. Hace poco más de 10 años, Thiago (4) sufrió daños cerebrales irreversibles cuando el campeón del TC Eduardo «Lalo» Ramos, manejando borracho y a alta velocidad, los chocó. Y ahora la historia se repitió: otro conductor alcoholizado embistió el auto en el que iban el chico, hoy de 15 años, con su mamá, Rocío Dusek (36).
Todo ocurrió este domingo, alrededor de las 22, en la ruta provincial 88 y la calle Génova, en las afueras de Mar del Plata, adonde un Volkswagen Gol chocó a un Renault Clio, a un Chevrolet Classic y a una Chevrolet Meriva, en la que iban el adolescente con su madre y que quedó con la parte trasera destruida.
Cuando le practicaron el test de alcoholemia al conductor, identificado como Leonardo Salas Pinto, dio positivo: 1,90 gramos de alcohol en sangre. El fiscal Rodolfo Moure requirió su detención por el delito de «lesiones graves» (causadas al ocupante de uno de los vehículos involucradas, que sufrió una fractura) y consideró que actuó «con dolo eventual» .
Según se supo, había salido a festejar su cumpleaños 43, que es este lunes. Antes de chocar a los otros autos, lo vieron realizando maniobras temerarias de sobrepaso.
Las víctimas fueron atendidas en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) de Mar del Plata. Según las fuentes, sufrieron lesiones leves.
El Meriva quedó con su parte trasera destruida por el impacto del Gol, al igual que lo ocurrido con Ramos, por lo que tuvieron que intervenir los bomberos del cuartel Monolito.
El antecedente de Lalo Ramos
El 29 de marzo de 2014, Thiago tenía cuatro años cuando el ex piloto de TC «Lalo» Ramos, a bordo de un Mercedes Benz, chocó desde atrás al Chevrolet Corsa en el que el nene viajaba junto a su familia, para ir a la playa, en el kilómetro 19 de la ruta 226, que une Mar del Plata con Balcarce.
Ocurrió a la altura del Paraje La Gloria de la Peregrina, cerca de Sierra de los Padres.
Ramos, que viajaba a alta velocidad, tenía 1,54 gramos del alcohol por litro de sangre, tres veces la cantidad legalmente admitida por entonces, ya que ahora rige la ley de alcohol cero en la Provincia.
A mediados de junio de 2017, el juez Pedro Hooft permitió el juicio abreviado en el que el ex piloto se declaró culpable de «lesiones culposas agravadas por la conducción de un vehículo automotor» y acordó una pena de dos años y seis meses de prisión en suspenso. Además, quedó inhabilitado a conducir por cuatro años.
Para la familia del nene, el pedido de juicio abreviado «fue propio de un cobarde«.
Por el impacto, Thiago sufrió triple fractura de cráneo y daños neurológicos irreversibles.
EMJ