Los ciclos en los medios, y principalmente en la TV, muchas veces no son duraderos y finalizan antes de lo pactado. A decir verdad, cualquier programa, salvo éxitos rotundos, hoy están muy sujetos a lo que ocurra en los números.
Mismo las autoridades de un canal, pueden tomar decisiones que son totalmente inesperadas, o los protagonistas en sí también pueden cerrar sus etapas. Y en este caso, la que se emocionó al irse de Poco Correctos, programa de El Trece, es María Belén Ludueña.
El pasado 23 de octubre fue su última salida como panelista. Conmovida hasta las lágrimas, la histórica integrante habló desde lo más profundo de su corazón respecto a lo que significada culminar su labor como columnista.
“Es horrible, siempre lloro. Lo que ven es lo que soy, siempre lloro. Seguro que mi mamá también debe estar llorando en mi casa porque somos todos así. Simplemente les quiero agradecer«, comenzó expresando, visiblemente conmovida.
A la partida del Chino Leunis, también se sumó la de Belén, quien tuvo palabras de muchísimo agradecimiento: “De todos y cada uno me llevó algo muy especial. Gracias a la gran producción que tenemos, a los técnicos, a todos los camarógrafos, a los sonidistas porque sin ellos no podríamos salir al aire, make up y a las autoridades del canal que me dieron la oportunidad de trabajar y me dan la posibilidad de hacer lo que tanto me gusta y lo que me apasiona«.
EL TRISTE ADIÓS DE MARÍA BELÉN LUDUEÑA
Esperanzada con lo que vendrá por delante, aunque por el momento no hay certezas de lo que será su futuro, sus fanáticos también lamentaron su partida. Su semblante único a la hora de trabajar, con un enorme profesionalismo, es algo que hoy cuesta mucho conseguir en la TV actual y se la extrañará muchísimo.
“Gracias a Adrián Suar, Pablo Codevilla y a Coco Fernández que fue el que me trajo, así que se lo quiero agradecer a él. Calculo que nos vamos a seguir viendo porque me encanta lo que hago, me apasiona lo que estoy haciendo y quiero seguir creciendo. Uno cuando labura por lo que quiere, las oportunidades llegan. Me da un poco de pena terminar porque la paso bomba acá. Es un hasta luego«, sostuvo Ludueña.
Emocionada hasta las lágrimas, cerró su relato muy conmovida: «Uno cuando labura por lo que quiere, las oportunidades llegan. Me da un poco de pena terminar porque la paso bomba acá. Es un hasta luego«.