El mal tiempo que está aquejando a Europa ha despertado el alerta máxima entre las autoridades de varios países del Viejo Continente, especialmente en Alemania y en Inglaterra –donde ya ha fallecido un conductor-, ya que son los lugares donde más se está haciendo sentir no solamente el frío extremo, sino, también, las intensas lluvias y tormentas de nieve que se vienen registrando en los últimos días.
Según un informe publicado en EuroNews, en ambos países, las autoridades se vieron obligadas a tener que disponer el cierre de las escuelas, al tiempo que recomendaron a la población no salir de sus casas, salvo en casos de extrema urgencia o necesidad.
En el caso puntual de Alemania, son varias las ciudades que ya llevan varios días bajo el agua, en tanto que en algunas zonas de Baja Sajonia y Bremen, volvió a llover intensamente en las últimas horas, lo que provocó que el nivel del agua de varios ríos, como el Aller, el Leine y el Weiser, subiera de manera preocupante, aumentando así de manera exponencial la posibilidad de inundaciones.
Por su parte, Inglaterra está siendo fuertemente azotada por la bautizada “Tormenta Henk”, especialmente en varias zonas del sur, con fuertes ráfagas de viento y lluvias torrenciales. En tanto que en la ciudad de Greenwich, que está ubicada al sudeste de Londres, los servicios de emergencia tuvieron que acordonar una calle que había quedado completamente cortada debido a la caída de un andamio que se derrumbó como consecuencia de las fuertes ráfagas de viento que se desataron sobre la zona y que también provocaron la caída de un inmenso árbol en Crown Woods Lane, también en Greenwich.
Ante este preocupante panorama, la Oficina Meteorológica del Reino Unido emitió un alerta amarilla por vientos que podrían provocar graves perturbaciones en los desplazamientos, daños en las infraestructuras y cortes de energía eléctrica tanto en el sur de Inglaterra como de Gales, ya que según el informe meteorológico, se esperan rachas de entre 110 a 130 kilómetros por hora en las costas expuestas de las zonas occidentales, mientras que en el interior hay avisos por vientos de entre 80 a 100 kilómetros por hora.