Durante la madrugada y ya aprobada en general la Ley Bases, los fuertes cruces entre oposición y oficialismo continuaron en la votación en particular. Sin embargo, una acalorada discusión entre la senadora de Unión por la Patria (UxP) Juliana Di Tullio y la presidenta del Senado, Victoria Villarruel, por la demora en votar de la legisladora kirchnerista, transformó la sesión en un campo de batalla legislativo.
Previo a votar el título 10: disposiciones finales, correspondientes a los artículos 234 a 238 inclusive, el senador de la Unión Cívica Radical (UCR) Martín Lousteau pidió una moción de orden para incorporar a la votación su propio dictamen, que consideraba como algo nuevo y que aseguraba que se podía tratar antes de la votación del dictamen de mayoría.
Esto fue corregido por las autoridades de la presidencia del Senado que explicaron que, según el reglamento de la Cámara, lo que solicitaba el senador radical era incorrecto. Tras ello, se procedió con la votación.
Todos los presentes votaron, pero Villarruel se percató que faltaba la emisión de un voto. Tras revisar quién era, notó que faltaba Juliana Di Tullio. “Estamos votando el dictamen de mayoría. ¿Va a votar? Es el único voto que queda. ¿Puede votar? Estamos esperando su voto”, le achacó la vicepresidenta de la Nación.
Con el micrófono apagado, Di Tullio se negaba a emitir su voto hasta que se resolviera correctamente lo planteado por Lousteau. Entonces, Villarruel se anticipó: “Se abstiene en el voto. No puede frenar la votación. Estamos votando de acuerdo a lo que dice el reglamento. Cerramos la votación, entonces”.
Sin respuesta de parte de la senadora de Unión por la Patria, se cerró la votación con resultado afirmativo: 36 a 32 y una abstención. Sin embargo, Di Tullio reclamó lo sucedido. Villarruel replicó: “Vote por sí o por no. No puede frenar la sesión”.
De vuelta contra Lousteau, la presidenta del Senado indicó: “Usted senador hizo una moción, la moción la rechazó el miembro informante [Bartolomé Abdala]. Estamos votando el dictamen de mayoría”.
Al mismo tiempo, Di Tullio intentó intervenir, sin embargo no se le autorizó la palabra. Nuevamente, Villarruel volvió a preguntar si cambiaba su voto. “¿Cuál es la voluntad de la senadora? ¿Es afirmativo al dictamen o es por la negativa? No puede estar en el limbo que usted quiere estar solo por sentar un punto. La estamos esperando hace 15 minutos. Puede votar si no quiere, es su posición”.
Fue en ese momento que Di Tullio tomó la palabra. “¿Hablo yo o habla usted?”, le rezongó a Villarruel. “Le dije que detenga la votación hasta no resolver lo que el senador Lousteau”, pidió. Y planteó: “No puede dejar este antecedente en la Cámara. Es una violación al reglamento y sus deberes como presidenta. Ningún senador puede ser desoído en una moción de orden”.
LA NACION