Luego de que el Gobierno diera a conocer las nuevas escalas del impuesto al lujo para los autos 0km, las primeras listas difundidas por las automotrices evidenciaron una baja de precios de algunos modelos. Pese a que se creía que eso iba a impactar de igual manera al mercado de autos usados, desde el sector explicaron que la tendencia no tiene relación.
Tradicionalmente, era el valor de un auto nuevo el que definía, para abajo, el precio de aquellos con kilómetros recorridos. Sin embargo, en los últimos años la Argentina vive una paradoja en la que los seminuevos incluso cuestan más caros que un vehículo sin uso.
El motivo radica principalmente en las dificultades que tuvieron las automotrices para ingresar unidades al país durante los últimos dos años y satisfacer la demanda interna. Al día de hoy, acarrean una deuda con sus proveedores como consecuencia de las medidas económicas llevadas a cabo en 2023 por el entonces ministro de Economía, Sergio Massa.
Al tener precios cambiantes y una demanda insatisfecha, la gente se vuelca al mercado de seminuevos. Además, comprar un 0km implica incluso demoras en las entregas, algo que seduce aún más a los consumidores para optar por el otro mercado, donde las operaciones son inmediatas.
Con esa lógica, se presumía que con la actualización del impuesto al lujo y un ordenamiento del mercado 0km, los usados iban a bajar de precio. Algo que no ocurrió y, por el momento, tampoco se prevé que ocurra.
“Algunos seminuevos bajarán y otros subirán, eso va a depender de si hay disponibilidad para entregar los modelos. Lo que sí, vamos a tener un precio de lista más realista”, comentaron desde el sector a LA NACION.
Lo que explican por su lado referentes de Kavak, empresa especializada en la compra-venta de autos usados, es que los seminuevos “siguen la evolución del dólar más que la de los 0km”, motivo por el cual consideran que “la modificación del impuesto no afectaría al sector de usados”.
En líneas generales, fuentes consultadas coinciden en que el precio del usado está ligado, no sólo al movimiento del dólar, sino al stock. Por más que las listas se sinceren y los precios sean más realistas, “los precios se adecúan para adaptarse a la demanda en tanto el poder adquisitivo de las personas se acomoda”, explicaron.
Durante 2023 se transfirieron 1.654.395 autos usados, según informó la Cámara del Comercio Automotor (CCA). En un contexto de incertidumbre en el mercado de 0km, con repercusiones en precios y disponibilidad para la adquisición de nuevos modelos, los vehículos de segunda mano ganaron terreno y crecieron un 5,32% frente a 2022.
Si bien el sector mostró un crecimiento el año último, su alza fue consecuencia de las dificultades antes mencionadas en el mercado de 0km. Incluso se vivieron situaciones complejas en la decisión de compra de un usado, donde los autos más buscados no terminan siendo los más vendidos.
Los precios, por su lado, también advirtieron modificaciones. Dado que siguen la corriente del dólar, se vieron aumentos a lo largo de 2023, pese a que algunos de ellos no perdieron valor si se los cotiza a la moneda estadounidense.
En esa línea, los usados más vendidos siguieron siendo los Volkswagen Gol y Gol Trend, Chevrolet Corsa y Classic, Toyota Hilux, Renault Clio y Ford Ranger. En ningún caso, los montos bajaron de $2.849.000 (con 15 años de antigüedad), siendo las pick ups las más caras de ese listado.
