El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció en una conferencia de prensa que se va a retirar el capítulo de la Ley de Bases para agilizar su aprobación. «Lo que no queremos es que por este capítulo fiscal se demore algo que necesitamos urgente. En función de esta situación, decidimos retirar el capítulo fiscal de la Ley de Bases«, admitió.
«Como ustedes saben, estas semanas se ha estado debatiendo con los gobernadores, legisladores y fuerzas productivas la Ley de Bases, que cuenta con dos capítulos bien diferenciados: un capítulo de más de 500 artículos que implica un cambio estructural y regulatorio en el país, que va a sentar las bases para que el país realmente pueda desarrollarse y crecer durante los próximos 10 o 20 años», arrancó diciendo el ministro.
Y continuó: «Hay un capítulo fiscal que habíamos incluido en la ley con el objetivo de llegar a nuestro compromiso que tomamos con la sociedad de equilibrar nuestras cuentas fiscales y llegar al déficit cero«. En este contexto, afirmó que «hemos tenido un claro consenso de lo que nosotros creemos que es la parte más importante de la ley que son estos más de 500 artículos que vienen a sentar las bases para el crecimiento y ha habido un cierto disenso, como todos saben, en lo que es el capítulo económico».
«Hemos escuchado a todos y compartimos buena parte de esos reclamos», y posteriormente fue muy contundente al indicar que «lo que de ninguna manera queremos es que, por este capítulo fiscal, se demore algo que es necesario y urgente, que es lo que realmente queremos mostrarle al mundo, porque están todos mirando. Es por ello que hemos decidido retirar el capítulo fiscal de la Ley de Bases de manera de facilitar y acelerar su aprobación».
Por otra parte, aclaró que «eso implica que vamos a dejar nuestro compromiso de ir al equilibrio fiscal, nuestro objetivo de déficit cero», y agregó: «El paquete fiscal es el paquete de estas cinco medidas que son el blanqueo, la moratoria, el adelanto de bienes personales, la ley de ganancias y las retenciones, el cambio de la fórmula jubilatoria. Eso es lo que se retiraría».
«Este es un Gobierno que escucha, pero es lo que cualquier gobierno deberia hacer», señaló y destacó que «a pesar de los gritos en el Congreso los escuchamos, hemos tenido reuniones con las siguientes cámaras, nosotros coincidimos con esos reclamos. Cómo no voy a entender a un gobernador que quiere proteger los intereses de su provincia».
«Siendo el capítulo fiscal algo que nosotros con trabajo y con diálogo con los legisladores lo podemos solucionar es que decimos que vamos a ir por la parte importante para ver qué podemos hacer por los argentinos en el plano fiscal, sin dejar de lado que no podemos gastar más de lo que se recauda«, advirtió
Caputo, ¿el nuevo súper ministro de Milei?
El presidente Javier Milei decidió el despido del ministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro, luego de que, desde la Casa Rosada dejaron trascender a media tarde, que alguien había filtrado información reservada a un medio periodístico.
«El tipo estaba desesperado, no le dejaban hacer nada, lo tenían cercado. Milei no le atendía el teléfono hace rato, Posse se cansó de discutir con él, y (Luis) Caputo nunca quiso que existiese el ministerio, se quería quedar con todas las cajas fuertes del gobierno», explicó una fuente de Casa Rosada que no aprendió la lección y habló con iProfesional, bien tempranito esta mañana.
El ministro de Economía ya le había arrebatado a Ferraro, en el momento del diseño del gabinete, dos áreas clave: Energía y Minería
Ahí surge un dato sustancial. Luego del ministerio de Economía, no existe otra con mayor caja política que lo que fue Infraestructura. En ese ministerio se contenían secretarías como Obras Públicas, Transporte, Vivienda y la estratégica Secretaría de Comunicaciones y Conectividad, que lleva adelante la jugosísima licitación del 5G que generará ingresos fabulosos al Estado. Por trazar solamente un paralelismo, el Ministerio de Justicia tiene la mitad del presupuesto con el que cuenta la más pobre de todas las secretarías enumeradas.
La decisión del presidente no es la de reemplazar al supuestamente indiscreto Ferraro, sino, una vez mas, modificar la Ley de Ministerios y diluir dicha cartera, para colocar todas sus poderosas secretarías bajo la órbita de Economía, es decir, de Caputo. Acumuladas todas allí, «Toto va a ser el ministro mas poderoso de la historia de la democracia. Nunca jamás todas esas áreas estuvieron bajo el poder la misma persona. De hecho, si mirás la delegación de facultades de la Ley Ómnibus, quien las va a recibir formalmente es el Presidente, pero de hecho todo queda en manos de Caputo. Un funcionario que no votó nadie, queda con la suma del poder público, una locura», analiza un diputado del PRO, avezado en cuestiones económicas.
El ministro de Economía ya le había arrebatado a Ferraro, en el momento del diseño del gabinete, dos áreas clave: Energía y Minería, fuentes de ingresos extraordinarios para el país y, dependiendo de su mejor o peor explotación, también de gastos. Ese «manoteo» de las áreas de último momento, resintió la relación entre ambos ministros y puso en alerta a Ferraro sobre las intenciones de Caputo. No iba a ser un «ministro de deuda» o de finanzas, como se especulaba, iba por todo.
A diferencia de lo que hubiese pasado con cualquier otro presidente, los tuits de Caputo buscando amedrentar gobernadores el día miércoles, que bloquearon la media sanción de la Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados, no generaron un reto o una incomodidad del jefe de Estado, sino una felicitación.
En el chat de ministros, cuando detectaron que Milei estaba eufórico con los ataques de Caputo a las provincias, el resto de ellos se subió a las chanzas y los halagos al titular de Economía. «Bien Toto, están todos cagados», escribió una colega del gabinete. El único que no respondió a la festejada bravuconada fue Ferraro, quien se veía venir la avanzada.